domingo, 6 de junio de 2010

POLITICAMENTE INCORRECTO

No soy marica. Es más cuando alguien en una conversación privada usa el término gay como sinónimo de marica, inevitablemente siento que está "mariconeando".
No hay que decir estas cosas y menos escribirlas. Pero mi columna semanal de rugby ha estado recogiendo una especie de autobiografías imaginarias en primera persona de rugbiers, con la intención de tocar temas variados del deporte y hacerlos más vivos. Empecé por el pilar y pienso acabar -supongo que la temporada que viene-, por el eterno suplente, lo que fui yo en mi vida rugbística. Al medio de apertura lo he hecho gay, pensando en el día del orgullo gay (Hay quien está orgulloso de ser maricón, decía mi amigo difunto Alvaro) pero lo he publicado ahora ante las reacciones provocadas por mi columna "Nunca te agaches por el jabón".
La homosexualidad en el rugby se soslaya. Y existe, en la misma proporción que en el fútbol o en la pelota, esto es menos de lo que pretenden los grupos de presión rosas pero haberlos haylos.
Y como ser marica sigue siendo peyorativo para la inmensa mayoría de la gente pues resulta que sacar el tema me ha convertido en gay para algunos cretinos. No es la primera vez que me pasa.
Dentro del armario sólo he estado dos veces en mi vida, una para ocultarme de la guardia civil y otra para jugar al escondite con un señor padre que no tenía que haber vuelto tan pronto a casa pero ambas hace tanto tiempo, uno era tan joven, que ya sólo me acuerdo de aquel olor a naftalina, a sudor y a miedo, común a ambos sucedidos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

que es lo correcto que tenemnos en el rugby?
el valor, la amistad y la perseverancia..
que es lo "correcto" que he debido hacer todo este tiempo; quedarme callado y no decir nada, porque cuando lo digo, me encuentro con paredes sordas..