PORCELANAS ROTAS

Cegado por la soberbia un esperpéntico firmador de bodrios propició un proceso penal que ha tenido cinco años sometido a pena de banquillo a un empresario guipuzcoano. Ha salido una sentencia de primera instancia absolutoria ocho meses después del juicio oral con un breve contenido de fundamentos para su fallo.

La irreparable desaparición de aquella empresa, sacrificados sus restos en el altar del becerro de oro inmobiliario, es una muesca más en el arma del más bravo de la banda de los PAGs pero tampoco se aclarará nunca –a nadie (Y fuera de los PAGS los demás somos nadie) le conviene-.

Nota.- PAG = putos amos de Gipuzkoa

www.diariovasco.com/v/20100731/cultura/jueza-absuelve-porcelanas-bidasoa-20100731.html