La terraza del bar está casi llena pero una mesa reservada a la sombra del toldo aguardaba a la cuadrilla a las 12 en punto del mediodía del domingo. Hubo quien pidió agua, la mayoría empezaron por champagne, un champagne Massé de excelente factura en Reims, otros vino blanco del Somontano. El aire de Huesca se perfumaba aún de albahaca bajo un sol capaz de asar al sarmiento las costillas laurentinas de un cordero, chuletitas que la hostelera rubia iba sacando a guisa de aperitivo, acompañadas de unas patatas fritas de las de antes de que se regalara el país a los bancos. Un joven larguirucho y delgado, salido de ninguna parte, se acerca ofreciendo baratijas y artesanía africana de ínfima calidad, se le compra sin regatear un par de pañuelos y él pide en francés a Alá que bendiga el corazón de todos y cada uno de los comensales, luego se aleja, confundiéndose con la escasa sombra del edificio.
- La mitología islámica es un buen producto para su marketing, una creencia ciega en un dios único, con un único profeta, que promete que si eres buen musulmán follarás en la otra vida lo que no has follado en la que hay y si no eres bueno te degollamos y que te jodan… - Hiruntchiverry comenta cuando el vendedor se ha sentado en la esquina sobre la alfombra de rezos que llevaba bajo el brazo -, mientras que la mitología cristiana con su santísima trinidad, sus profetas, sus vírgenes paridoras, sus santos milagreros, sus ascensiones, asunciones, apariciones, sus infiernos, sus purgatorios menguantes, su cielo azul con angelitos blancos y música de ascensor, es un producto más difícil de vender como no sea a hostias también, degollando o quemando vivos a los que no son buenos cristianos, por si acaso lo de la otra vida no sea verdad, que no debe serlo ni para el santo padre de Roma.
El marqués de Altamira sonríe ante la repetida perorata y comunica en voz más alta :
- Pues ahora hay un frente abertzale que quiere defender la Euskadi cristiana de toda la vida frente a los moros que nos invaden atraídos por nuestro marco incomparable de prestaciones sociales y nuestra nueva cocina vasca que les da empleo en negro en aras de retener su talento y esas chorradas.
- Mi abuela nos contaba que los moros de Franco violaban a las mujeres y luego las degollaban para arrancarles los dientes de oro. - El Barón de la Florida acaba con la tercera botella de Montesierra mientras habla -. Yo creo que los vascos tenemos, desde entonces, miedo al moro violador, degollador y sacamuelas.
Jon Galtzagorri indica gestualmente a la « barbie » empresaria que puede traer a la mesa más bebida y comida y añade :
- Mi abuela me contaba de niño que los moros arrancaban los dientes de oro a los cadáveres, lo que pasa es que todo al que mataban era declarado oficialmente rojo y separatista y me lo contaba mientras me preparaba la cena, luego mi amá se extrañaba de que yo tuviera tantas pesadillas.
Después de que se les han cambiado los vasos y se han sustituido los platillos por unos cuencos de barro decorado en estilo mudéjar, la dinámica y sudorosa hostelera les informa que les va a servir un guiso de toro de lidia de la pasada feria patronal, lo que ha interrumpido a Galtzagorri que prosigue :
- Ese frente neandertal actual europeo y que ahora está echando raíces, tan profundas como la del roble ancestral, en estas mentes sabinianas nuestras existe por lo menos desde que los neandertales se opusieron a los cromagnones inútilmente para acabar asimilados y hablando el cromagnon.
Manu Majors no disimula que ya no le cabe ni un gramo de comida y pone la mano sobre el cuenco, para proseguir las divagaciones que los vapores del alcohol les inspiran.
- Los europeos, que también descendemos de un bonobo africano, los blancos de aquí hemos sido más de viajar a tierra de negros para obligarles a remplazar a los indios que estábamos exterminando en Indias que de permitirles a ellos venir a traernos sus culturas, sus religiones, sus costumbres a cambio de que les dejemos que se ganen la pitanza aquí.
Gritarles « No pasarán » siempre ha sido muy eficaz, no hay más que leer a Sabino Arana y demás reprimidos pardelas del pasado – Galtzagorri se ha servido medio toro con su salsa en la pechera y el resto se ha quedado en la cazuela -.
- ¿Fue Mao el que dijo aquello de que si la violación es inminente relajate y disfruta ? - Aristide Labarthe concluye, indica que le lleven la cuenta como portador del bote colectivo.
La suya era la última mesa ocupada, el calor había provocado que la ciudad pareciera vacía bajo el sol de las cuatro de la tarde. La patrona no les cobró el descorche del champagne, aportado por Hiruntchiverry, e incluso les sirvió una ronda de cafés gratis antes de que cogieran las motos. Las motos estaban aparcadas a la sombra de unos árboles y allí siguieron hasta que los excursionistas se levantaron de su siesta en el suelo de la terraza del garito, bajo las mesas.
