viernes, 26 de noviembre de 2010

RUGBY FEMENINO ESPECIE EN PELIGRO

El rugby femenino se ha extinguido en las cuencas del Bidasoa al Urola, no queda ni rastro en esta parte del costa, sólo subsiste en la frontera oeste y en el profundo sur. Y el rugby femenino –como el rugby universitario también otro desaparecido del territorio-, es ya una parte esencial del rugby, de la concepción del mundo y de la vida que está actualmente en el rugby.
En su entierro hay una vela que ha quemado mi mano, porque mis circunstancias personales me impidieron colaborar más con un proyecto en el que creíamos. Pero no entiendo cómo hemos desaprovechado los esfuerzos de quienes hasta la temporada pasada estuvieron embarcadas en su mantenimiento.
Las mujeres que empezaron a jugar en la prehistoria del rugby eran las novias, hermanas, hijas o madres de los jugadores de tan viril deporte pero hace tiempo que las jugadoras de rugby son otras deportistas más, las que han encontrado en los valores del rugby, fundamentalmente en la convivencia de sus practicantes, su deporte, un deporte en el que siempre hay un sitio para toda persona que lo sea. Y parece que se han quedado estas damas sin sitio en Donostia, Irún y Zarautz sin que Ordizia y Hernani hayan tomado el relevo..
Desde el rugby se busca reconocimiento social para lo que alguna vez ya he calificado de “la marca del rugby”. Nuestro deporte tiene ciertamente un problema de imagen en la sociedad y todo lo que reduzca esa imagen y fomente los estereotipos es negativo para todos los que vivimos el rugby. Necesitamos enmendar entre todas y todos el error cometido ¿Podremos resucitar el rugby femenino más acá de Mondragón y Eibar?

lunes, 15 de noviembre de 2010

NININEO

Ni estudian ni trabajan pero todos tienen neopreno –me dijo el amargo profesor en la barra del bar catalán junto al Urumea-. Fócidos humanos que esperan que una legendaria ola les lleve a una fantástica playa pero como mucho acabarán entre los residuos que recoge el servicio de limpieza en la playa de la Zurriola y, mientras, las circunstancias meteorológicas les han llevado a surfear en el corazón burgués de la ciudad.
Hay algunos que estudian y trabajan y practican este deporte además pero –prosiguió-, otros se sumarán a esas eternas promesas caídas de todos los deportes en que sólo unos pocos llegan a la élite y de los que llegan también se derivan después juguetes rotos que no acaban de reciclarse en la sociedad. Y eso ya os pasa en rugby, y con el profesionalismo os pasará más como está pasando en Francia, porque ése que los jacobinos llamáis deporte rey es el que más detritus sociales produce y el rugby, como el baloncesto, otro deporte educativo, corre desbocado a ser un fútbol bis.
Aunque sea, los que se han esnifado Baqueira.-Beret pueden colocarse de cómicos en la telebasura mientras esperan que un negro les escriba sus memorias pero no creo que en ningún deporte tengáis un plan con medios suficientes para que los jóvenes que se van desenganchando tengan verdaderas alternativas de vida. Tampoco sé si vosotros sois los responsables de ello cuando todos estamos en un sistema educativo que ha prolongado la guardería hasta la universidad y ahora no sabe cómo aplicar Bolonia en la guardería –terminó y se despidió de mí con un par de húmedos besos, me pareció que tenía los ojos velados llorosos, a pesar de que sólo había bebido agua, fuera la ciudad se disolvía en la lluvia y el viento-.

lunes, 8 de noviembre de 2010

HACKING

El hacking en rugby consistía en pegar patadas en las tibias al adversario hasta que soltaba el balón. Esta acción del juego se prohibió al introducirse la regla del fuera de juego. Cuando hablamos de la evolución de las reglas del rugby, yo siempre me acuerdo del hacking perdido en la prehistoria del juego.

Estamos presenciando unos partidos en las dos divisiones de honor en los que, a mi juicio, los equipos se han acabado de adaptar a las nuevas reglas y las aprovechan para darle mayor celeridad al juego, sobre todo en las recuperaciones de balón. En ese aprovechamiento está destacando especialmente Ampo Ordizia, lo que redunda tanto en la tabla de clasificación como en la satisfacción de sus seguidores, cada vez más numerosos y en los que también se está dando una clara evolución hacia ser un público ejemplar.

Porque en el rugby el público es elemento esencial. Este juego necesita del espectador respetuoso con el adversario y con el árbitro pero que anima a su equipo y a cada uno de sus componentes siempre y que hace una fiesta de cada partido por lo que al final lo agradece aplaudiendo a todos los que, participando, le han dado una oportunidad de disfrutar del rugby.

Es evidente en las gradas que Pegamo Bera Bera no ha conseguido aun llevar una cantidad de espectadores comparable a Anoeta, mientras que el Hernani obtiene unas entradas muy dignas en Landare Toki en cualquier circunstancia. En todo caso, la calidad de los asistentes debe compensar los vacíos y el limitado aforo.

martes, 2 de noviembre de 2010

OLMEDO EN LA FRANJA VACIA

La “diagonal del vacío” europeo desde el sudoeste francés se prolonga por la meseta ibérica hasta el Algarve portugués, donde se ubican las demarcaciones territoriales con más baja densidad de población. Con la excepción de la capital, Valladolid es una provincia también de escasa población que limita con esa franja desértica de Segovia, Ávila, Salamanca, Zamora... a la que se asoma el núcleo urbano de Olmedo, 3.800 habitantes, que es una tranquila villa en medio de la nada que mira a la parte de su pasado que aun no se ha destruido mientras unas ovejas triscan las pajas que no se ha llevado el viento de la historia hacia Madrid ¿Son las ovejas vida inteligente?

Hacia 1.880 mi abuelo Maximino salió de Olmedo impulsado por el hambre y el orgullo. Había acompañado a su padre a cobrar la peonada a casa del capataz y éste la arrojó por la ventana al suelo de la calle, donde su padre se agachó a recoger las monedas ¿Qué hace padre?
-Lo que tú harás si quieres comer por estas tierras.
Con apenas diez años pidió a su madre que le diera lo que pudiera. Él no se iba a agachar jamás. Se fue a Santander y trabajó -había nacido trabajando-, en lo que pudo, se enroló en el ejército, hizo la guerra de Cuba, pasó tres años preso allí, apreciando la carne de tortuga, y regresó sargento, destinado a Urgull, en Donostia conoció a una navarra que con doce años se había ido de casa de un padrastro pederasta. Se pusieron a tener hijos y de su hija más pequeña soy el más pequeño de los hijos.

Tenía curiosidad por detenerme en Olmedo. Tres noches de buena casa rural, Las Cavas, y unos paseos por lo que podía haber sido un pueblo bello y atractivo pero que los años de desidia con los de desarrollismo sin cabeza ni gusto, más las frustraciones de especuladores y los abortoides que los políticos han intentado como sucedáneos de puntos de atracción turística o industrial, han dejado como uno más de los innumerables villorrios dispersos por el páramo carpetovetónico. Evidentemente hay materia prima para una transformación, los empresarios hosteleros se han inventado un Hotel balneario y los alojamientos rurales, pero... las ovejas, con su mirada deprimida, parecen decir que Olmedo se asomará siempre a la franja vacía de la desesperanza.

De todas maneras, cuando vayas de Valladolid a Madrid por la N 601, detrás de la nube que la Azucarera proyecta sobre la carretera, verás que se asoma Olmedo. Párate, come lechazo en el Rincón Mudéjar o en Los Caballeros, no abuses del “ribera” y date una vuelta por sus calles y quizá debajo de una ventana enrejada veas el fantasma de un mocoso observando colérico el fantasma de un padre resignado que se agacha a por unas monedas para dar de comer a su familia en aquel Olmedo del Caballero.

BRUCE BERESFORD DIRECTOR

En la Seminci el sábado 30 de octubre. Me gusta ir al Festival de Cine de Valladolid -gracias a Javier Angulo que me dio la oportunidad de descubrirlo-, y verle trabajar a Marta en la alfombra roja, conocer al equipo y demás.
La película de clausura fue "Mao's last dancer" dirigida por el australiano Bruce Beresford, reseña en http://en.wikipedia.org/wiki/Mao%27s_Last_Dancer_%28film%29
Odiaba el ballet -el infierno es un espacio con música ambiente de los mejores ballets de la historia-, hasta este sábado. Ahora comprendo que se pueden hacer buenas películas, además de las de kung fu, con ballet.
En el coktail final pude charlar con Mr, Beresford un ratito. Estaba muy contento de la victoria de Australia sobre los All Blacks -efectivamente hablamos de rugby-, y se mostró bastante optimista sobre las posibilidades de los canguros frente a los kiwis en la RWC 2011. Ignoraba totalmente que en España se jugase al rugby y le expliqué un poco la historia de El Salvador además de hablarle del partido que se jugaba el domingo frente a La Vila -espero que no fuera a verlo-.
¿Por qué le hablé enseguida de rugby? A un segunda línea se le reconoce enseguida por un talonador, y Mr Beresford fue un buen segunda en su juventud.
Espero que en próximos años Seminci, El Salvador, El Quesos y el rugby estén más cercanos, merece la pena.