LA VIE EN GRIS

La delantera francesa se ha impuesto sin brillo a un equipo escocés que se hacía con el balón e intentaba jugar pero que no conseguía superar la cortina defensiva perfecta de un enorme Domingo y los otros siete delanteros, mientras que los tres cuartos franceses no intentaban siquiera penetrar con convicción salvo en dos acciones sueltas de la primera parte, a partir del dominio francés en los agrupamientos, en que Bastereaud recibió el balón con toda la ventaja y no lo desaprovechó. Beattie por Escocia y Harinordoquy por Francia encarnaron las mejores virtudes de un rugby en el que las chispas de las colisiones iluminan lo parduzco del espectáculo.